2013

Hace mucho tiempo dejé en el olvido este blog. Pero hoy, quisiera retomarlo con un post sencillo, hablando de lo que en general este año significó para mí: cambios. Cada segundo y cada minuto hay cambios de todo tipo, pero este año realmente estuvo abarrotado de cambios por montones que cayeron en forma de una cascada épica e incontrolable.

Este ha sido uno de los años más revolucionarios de mi vida, como muchos otros que pasaron y como muchos más que vendrán y creo que sin lugar a dudas, vale la pena hacer un pequeño recuento, aunque para ustedes lectores desconocidos, esto no signifique nada.

El año de los viajes
2013 fue el año en el que me di el lujo de viajar a muchos lados que no conocía y siempre quise conocer. Mi primera salida del país, a Perú y Chile, es de las mejores cosas que he vivido, con más de 900 fotos que lo evidencian. Fui también a San Andrés, Medellín, Cartagena y hasta paseé por Acacías (Meta). Definitivamente, lo mejor que cualquiera puede hacer con su vida es viajar y lo he reafirmado, por lo que trataré que eso sea una meta de aquí a varios años, conocer tantos lugares como pueda.

El año de los conciertos
Con la ida a Lollapalooza en Chile y con los otros conciertos más que viví y viviré, reafirmo nuevamente mi voraz apetito por la música en vivo. La amo, es la mejor experiencia que cualquiera puede tener (fuera de los viajes) y seguramente en el 2014 seguiré yendo a cuanto concierto pueda. Es la mejor adicción y definitivamente, no planeo dejarla.

El año de los cambios
Por primera vez en casi seis años, estoy sin novio. Fue duro terminar con alguien que realmente fue muy especial para mí y asumirme como una persona "soltera" luego de varios años de estar acompañada. La experiencia no ha sido fácil. Este, ha sido un cambio radical e importante para mí, puesto que antes de partir lejos del yugo paternal, ya estaba en una relación. Tengo aún muchas cosas que aprender de esta clase de soledad, pero la he manejado de la mejor manera que he podido. Y creo que es muy bueno estar así: rodeada de buenos amigos, descubriendo mis pasatiempos, empleando mi tiempo en lo que realmente quiero hacer y persiguiendo mis sueños. Suena tonto, pero a veces cuando estás en una relación de mucho tiempo, dejas de pensar en ti y a un lado queda realmente quien eres y lo que quieres ser. Estoy segura que a más de uno le pasa.

Además de ese gran cambio, centrado básicamente en mí, les puedo decir con toda seguridad que la Ángela de enero de 2013 es muy diferente a la del 31 de diciembre. Realmente creo que me siento y hasta me veo diferente.

El año de las ideas independientes
Es increíble el montón de tiempo libre que queda cuando no se está en una relación formal de noviazgo. Este año, aproveché mi tiempo para dar rienda suelta a mis proyectos independientes. Empecé a dibujar más como pasatiempo, cuando no tenía nada que hacer y en algunas reuniones de trabajo, debo reconocerlo. También desarrollé mi primera idea digital con un grupo de trabajo maravilloso e improvisado, donde si bien no conseguimos la tan anhelada financiación, llegamos a la etapa semifinal del proceso. En todos mis años de empleada eficiente y conforme, jamás me había sentido tan capacitada para poder dar rienda suelta a mis ideas, por más locos que sean y por más loca que a veces sea yo. Es un bonito impulso que no quiero perder.

El año de los amigos y la familia
Aunque nunca he sido de esas viejas hiper-enfocadas en su relación, al aprender a estar en "soledad", me di cuenta de lo bien rodeada que estoy. Cuento con un combo de amigos increíbles en mis dos ciudades: Bogotá y Barranquilla, quienes procuran estar conmigo y apoyarme en cuanta locura, fiesta e idea ocurrente tenga en mi cabeza. Y por supuesto, mi familia que siempre ha estado ahí para mí, a pesar de mi anti-diplomacia y tosquedad, han apoyado cada uno de mis movimientos, siempre, siempre, siempre. ¿Cómo no estar feliz con tan buena compañía?


Y bueno, casi sin darme cuenta, ya se acabó el 2013. El 2014 depara muchas sorpresas para mí. Y cada vez estoy convencida que cada cosa que pasa, buena o mala, tiene una razón, una secuencia, una trayectoria para mi vida que iré entendiendo poco a poco. Lo bueno es que a medida que la voy entendiendo, más me gusta. Tengo la firme convicción que se trata de una trayectoria hacia la felicidad.



Comentarios

  1. Que nota Angie!
    Un año contundente con mucho aprendizajes, bienvenido el 2014 :)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

A pedacitos

El cielo de Susie

El "mejor español"